31 de marzo de 2011

Review: Blut Aus Nord "777 Sect(s)" (2011)

Por Fernando Suarez.

-Blut Aus Nord “777 sect(s)” (2011)
Blut Aus Nord es uno de esos grupos que, hablando mal y pronto, no fallan nunca. Evidentemente, el Oscuro está de su lado porque no sólo su apetito explorador se hace cada vez más insaciable, sino que encima prácticamente todo lo que encaran (musicalmente hablando, claro está) se traduce en resultados más que interesantes. Pueden ponerse atmosféricos, casi sinfónicos por momentos, más adelante transformarse en una amorfa máquina de destrozar neuronas, luego volver al refinamiento y hasta desorientar a todo el mundo con ocasionales piezas de una inesperada y áspera crudeza. Y todo ello siempre manteniendo la vil esencia Blackmetalera que los define. “777 sect(s)” es la primera parte de una trilogía (luego vendrán “The desanctification” y “Cosmosophy”, todas con el sufijo “777”) y, si toda la cosa viene así, ya mismo pueden ir cerrando el Black Metal porque veo difícil que algo supere a una obra de semejante magnitud. ¿Cómo explicar esto? Veamos, en primer lugar aquí se vuelven a hacer presentes las influencias Godflesheras que tan bien le sentaran a estos franceses en discos como “MoRT” y “Odinist”, traducidas en crujientes ritmos mecánicos, graves degradados y pútridos, punzantes chillidos de guitarra y atmósferas de absoluta y tortuosa opresión post-nuclear. Pero eso no es todo, Vindsval y los suyos siempre tienen un as bajo la manga. En lugar de concentrarse en los tempos aletargados y los riffs simples concebidos por la banda de Justin Broadrick, Blut Aus Nord suma violentas aceleradas, numerosos cambios de ritmo y un trabajo de guitarras intrincadísimo, capaz de rivalizar con las horas más laberínticas de Deathspell Omega. O sea, imaginen las distópicas visiones de Godflesh, su corrosivo entramado sónico y su capacidad para generar sensaciones de asfixia física, sumados a las estructuras surrealistas y el desesperante caos lisérgico de Deathspell Omega. Les puedo asegurar que el resultado es tan intenso que, por momentos, se hace intolerable. Y es que, lejos de tratarse de una mera concepción musical de diseño (esto más esto es igual a esto otro), estos tipos ponen en el alma (o lo que queda de ella) en sus sórdidas arquitecturas musicales. Así, tenemos lugar para momentos de desgarradora belleza melódica que, en lugar de suavizar la faena, hacen que esta se sienta profundamente en las entrañas. Y, al mismo tiempo, sólo el minucioso y perverso trabajo de orquestación con guitarras y samples, ya merece un detallado análisis, que no haremos aquí, por supuesto. Es que todo este palabrerío no es más que cáscara vacía ante el poderío emocional de “777 sect(s)”. Sencillamente imprescindible.

2 invocaciones del cosmos:

TRVE FVCKING SHIT
Aguante, lo quiero yaaa

toda la fe del mundo le tengo