5 de julio de 2011

Review: Exhumed "All guts, no glory" (2011)

 Por Fernando Suarez.

-Exhumed “All guts, no glory” (2011)
Exhumed no es una banda para andarse con mariconadas o dobles lecturas. Uno no espera de ellos experimentación, vanguardismo o vueltas de tuerca inesperadas. No son técnicos, claro, pero tampoco se prenden en el revival de la vieja escuela, sino que se mantienen firmes junto a su pasión Carcassera adornada de Thrash Metal, lo que ellos mismos alguna vez llamaron Gore-Metal. Seis años pasaron desde su anterior placa (los covers de “Garbage daze re-regurgitated”) y ocho desde su anterior placa con material propio, el oscuro “Anatomy is destiny”, pero estos melenudos californianos vuelven a la carga como si nada, con las guitarras afiladísimas, los blast-beats siempre a mano, la podredumbre en su punto justo y los juegos de gruñidos graves y chillidos agudos bajo el brazo. Claro, a esta altura el estilo de Exhumed está más cerca de “Necroticism” que de “Reek of putrefaction”, al menos en términos de precisión instrumental y claridad sonora, aunque las composiciones siguen manteniendo ese gancho sencillo y cabeza tan entrañable e irresistible. Bueno, también es cierto que el rótulo de “clones de Carcass” nunca fue del todo adecuado para describir a esta gente, aún cuando las influencias fueran clarísimas e innegables. Y es que, con más de veinte años de carrera (bueno, con alguna pausa en el medio, claro) sobre sus espaldas, estos tipos ya forjaron una identidad musical propia, a fuerza de riffs carniceros, actitud distendida y una brutalidad controlada que nunca se pone en el camino del gancho y la potencia. En ese sentido, “All guts, no glory” es un perfecto disco de Exhumed y hasta se permite una impronta propia, no tan pútrido como aquél inicial “Gore Metal”, no tan preciso y lacerante como el genial “Slaughtercult”, no tan elaborado como el mencionado “Anatomy is destiny” pero, al mismo tiempo, con algo de todos ellos y el agregado de cierto color Thrasher más prominente en las guitarras. En fin, es un disco nuevo de Exhumed y eso significa diversión, tripas y riffs furibundos para todo el mundo, ¿qué más quieren?

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